¡Un broche perfecto para finalizar una comida o una cena!
INGREDIENTES: (para 4 ó 5 moldes tipo flanera)
- 1 lata de leche de coco (400 ml )
- 5 cucharaditas de mermelada de piña
- 50 grs de azúcar
- 6 láminas de gelatina.
RUMBO A LA RECETA:
En primer lugar, ponemos a ablandar las hojas de gelatina en un plato con agua fría, para que se hidraten y se ablanden (2-4 minutos aprox).
Calentamos la leche de coco junto con el azúcar ( no tiene que hervir ) escurrimos la gelatina y añadimos a la leche de coco, movemos bien hasta que se disuelva bien la gelatina.
Con mucho cuidado vertemos la mezcla de leche de coco que tenemos reservada tapando la mermelada y sin llegar al borde del molde.
Una vez llenos los moldes los volvemos a meter al frigorífico y dejamos que cuaje totalmente (esta vez durante más tiempo, unas 5 horas más o menos ).
Para desmoldar meter el molde en un vaso de cristal con agua caliente ¡SOLO UNOS SEGUNDOS!
Volcar sobre el plato que se vaya a utilizar, decorar al gusto y.... ¡ya estás tardando en hacerlo!
En primer lugar, ponemos a ablandar las hojas de gelatina en un plato con agua fría, para que se hidraten y se ablanden (2-4 minutos aprox).
Calentamos la leche de coco junto con el azúcar ( no tiene que hervir ) escurrimos la gelatina y añadimos a la leche de coco, movemos bien hasta que se disuelva bien la gelatina.
En cada molde, echamos una parte de la mezcla anterior ( de dos dedos de espesor más o menos) y reservamos el resto.
Metemos los moldes en la nevera hasta que cuaje la gelatina (2 horas).
Sacamos del frigo y con ayuda de una cucharita hacemos un hueco en el centro, sin llegar a la base.
Lo rellenamos con la cucharadita de mermelada de piña.
Con mucho cuidado vertemos la mezcla de leche de coco que tenemos reservada tapando la mermelada y sin llegar al borde del molde.
Una vez llenos los moldes los volvemos a meter al frigorífico y dejamos que cuaje totalmente (esta vez durante más tiempo, unas 5 horas más o menos ).
Para desmoldar meter el molde en un vaso de cristal con agua caliente ¡SOLO UNOS SEGUNDOS!
Volcar sobre el plato que se vaya a utilizar, decorar al gusto y.... ¡ya estás tardando en hacerlo!
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