Hoy, para dar la bienvenida al otoño, he preparado estos bizcochitos que seguramente son los más esponjosos y ricos que he probado nunca, si no me crees, te reto a que los hagas y me cuentes que te han parecido. ¿No tienes molde de silicona? no te preocupes porque en cápsulas de papel salen igual de ricos... ¡Ya ves que no tienes excusa!
Ingredientes: (Salen 12 bizcochitos)
- 250 g de galletas caramelizadas (1 paquete + 8 galletas)
- 1 cucharada sopera (rasa) de levadura Royal
- 50 ml de leche de soja
- 50 ml de aceite de girasol
- 100 g de azúcar
- 4 huevos tamaño L
- 1 cucharadita de esencia de canela (opcional)
Glasa:
- Canela molida
- Azúcar glas
- leche de soja.
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180ºC.
Trituramos las galletas.
Separamos las yemas de las claras y montamos éstas últimas a punto de nieve.
Batimos las yemas junto al azúcar hasta que la masa blanquee, añadimos el aceite, la esencia de canela, la leche de soja y mezclamos bien con ayuda de las varillas eléctricas.
Incorporamos la levadura a las galletas trituradas y añadimos a la mezcla de yemas mezclando hasta que estén todos los ingredientes integrados.
Con ayuda de una espátula vamos incorporando las claras a punto de nieve poco a poco y con movimientos envolventes.
Colocamos el molde de silicona sobre una bandeja de horno, llenamos cada cavidad unos 2/3 de su capacidad y horneamos durante 20 minutos más o menos (antes de sacarlos pinchar con un palillo que ha de salir seco).
Una vez fuera del horno los dejamos reposar en el molde 5 minutos, desmoldamos y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla metálica.
Preparamos la glasa mezclando el azúcar glas junto a la canela y un poco de leche de soja (las cantidades a tu gusto).
El siguiente paso ya lo sabéis... ¡Preparar una taza de té!
Para merendar, para desayunar o cómo tentempié de media mañana, mientras te queden bizcochitos no querrás comer otra cosa, porque son altamente adictivos.