La primera vez que vi una tarta decorada con la técnica "stained glass" me quedé maravillada y me la apunté mentalmente como pendiente para hacer en el momento que tuviese ocasión, y qué mejor ocasión que ésta, el cumpleaños de la sombra de mi sombra (ya sabéis a quién me refiero porque en otra ocasión dije lo mismo), efectivamente es mi tarta de cumpleaños! Lo siento por el dicho ese de que en casa de herrero cuchillo de palo, porque aquí en la mía no se cumple nunca.
La elaboración de la tarta es super sencilla pero es cierto que para hacerla se necesita algo más que los ingredientes y es tiempo, paciencia y un pulso de cirujano (no es mi caso porque cuanto más empeño pongo para que no me tiemble, me ocurre todo lo contrario, jiji), además ya lo sabéis por otras veces que el dibujo no es mi fuerte, o mejor dicho... dibujo igual que una niña de dos años, o sea, que otra dificultad añadida si quería hacer una tarta decorada con esta técnica, pues necesitaba que alguien me hiciese un dibujo con los motivos (marinos por supuesto) que yo quería para mi tarta y vi el cielo abierto cuando hace unos días me tocó trabajar con un compañero que dibuja y pinta super bien, cuando le dije la idea que quería al día siguiente ya me trajo dos dibujos (uno de ellos queda pendiente para otra tarta que haré), lástima que con mis nervios he estropeado un poco el diseño, pero al final la tarta estaba muy rica, menos mal!!
¡Ahora sí, a navegar a la cocina sin perder tiempo!
Ingredientes: (molde redondo de 18 cm).
- 200 g de azúcar
- 200 g de mantequilla sin sal (consistencia pomada)
- 250 g de harina de trigo
- 8 g de levadura Royal
- 4 huevos
- 2 cucharaditas de aroma de lima- limón (u otro a tu gusto)
- Colorantes (optativo).
INGREDIENTES:
- Relleno: Crema de limón y lima (lemon & lime curd).
- Almíbar:
- 150 ml de agua
- 60 g de azúcar
- 1 cucharada de aroma de lima-limón.
Calentar hasta que el azúcar se disuelva por completo, dejamos enfríar y metemos en un biberón.
- Buttercream:
- 75 gr de mantequilla (consistencia pomada)
- 175 gr de icing sugar o de azúcar glass
- 4 cucharadas de crema de limón.
Mezclar con ayuda de las varillas eléctricas durante cinco minutos hasta obtener una crema parecida a una mousse.
Para decorar:
- 250 g de fondant de color blanco
- Piping gel
- Colorantes en pasta o en gel
- Biberón o manga pastelera y boquilla nº 1,5 (yo he utilizado una del nº 2, pero la próxima vez utilizaré la otra más fina)
- Pinceles de pelo natural (los otros rallan el fondant)
- Rodillo y alisador de fondant
- 1 rotulador de tinta comestible.
Preparamos el molde: lo engrasamos, enharinamos y sacudimos boca abajo para quitar el sobrante de harina.
Así preparamos el bizcocho:
Precalentar el horno a 160ºC.
Tamizar la harina junto a la levadura y reservar.
- Batir la mantequilla y añadir el azúcar, mezclar bien hasta obtener una mezcla suave.
- Añadir los huevos de 1 en 1 sin parar de batir hasta que estén bien integrados.
- Incorporar el aroma o esencia y agregar la harina poco a poco (en tres o cuatro veces).
- Podemos añadir un poco de colorante (yo lo he coloreado un poco de verde lima).
- Verter la masa en el molde y hornear durante 70 minutos aproximadamente (antes de sacarlo del horno, pinchar en el centro con una brocheta de madera, tendrá que salir seca sin masa pegada).
- Una vez fuera del horno, dejar reposar durante diez minutos, desmoldar sobre una rejilla y dejar que se enfríe totalmente.
- Envolver en film y guardar hasta el día siguiente.
Cortar por la mitad el bizcocho (mejor con una lira) y bañar con el almíbar.
Cubrir con el relleno y tapar con la otra mitad del bizcocho.
Con ayuda de una espátula cubrir toda la superficie con el buttercream (esto nos ayudará a pegar el fondant al bizcocho y a que quede más lisa la superficie) y reservar en la nevera.
Podemos dar una segunda capa si queremos (yo no lo he hecho).
Amasar el fondant y estirar con ayuda del rodillo dándole forma circular y con un grosor aproximado de 3 o 4 mm.
Cubrir el bizcocho y con ayuda de un alisador de fondant, lo vamos pegando hacía abajo, cortamos el fondant sobrante y ¡Ya está listo para decorar!
¡Vamos a disfrutar un buen rato pintando y coloreando!
Dibujamos sobre el fondant los motivos elegidos y teñimos el piping gel con los colores que vayamos a utilizar (yo me he quedado corta con el color negro y por eso no le he dibujado más "plomada de la vidriera").
Con ayuda de una manga pastelera o un biberón, delineamos todos los dibujos con piping gel de color negro (también puede hacerse con glasa real) y luego con ayuda de un pincel, los rellenamos con el piping gel de colores.
Por último podemos dar unas pinceladas sobre todo el fondo con colorante (azul en este caso) diluido en ginebra o en vodka.
Reconozco que el dibujo no es lo mío y que el pulso no me acompaña mucho en estos menesteres, jiji!!, pero como soy bastante cabezona, estoy segura de que la próxima tarta me saldrá mejor o por lo menos lo intentaré... "La repetición es la madre de la perfección" y yo pienso repetir y repetir!!
Ahora voy a pedir un deseo y a soplar la velita, que en eso soy muy clásica yo 😊
¡Un brindis a la salud de todos los navegantes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario